Evaluación de la motivación.

INTRODUCCIÓN
Hasta ahora, se han ido desgranando distintos modos de enfocar teóricamente el estudio de la motivación humana. Hay que reconocer que tan sólo se va a dar pistas para conocer sucintamente diferentes procedimientos de evaluación pero eso sí se tendrá que consultar otras referencias para poder usarlas efectivamente. En el terreno de la psicología, que es en el que nos movemos, ha sido la disciplina denominada psicometría la encargada de establecer cuáles deben ser esos requisitos. Como no es el momento de extenderse al respecto sólo nos vamos a limitar a decir que los mandamientos de la psicometría se resumen en dos: fiabilidad y validez (véase, por ejemplo, León y Montero, 1993). Un instrumento de evaluación es fiable en la medida en que arroja los mismos resultados independientemente de quién lo use o del momento temporal en que se aplique. Así mismo, será válido en la medida en que garantice que evalúa aquello que pretenda evaluar.

La observación es la técnica preferida por aquellos que entienden que la motivación se puede inferir a partir lo que una persona hace de forma manifiesta. Sin embargo, los que desarrollaron las técnicas de autoinforme entienden que la motivación depende, al menos en parte, de factores que se escapan a la observación, que pertenecen a la esfera de la actividad interna del sujeto, por lo que se hace necesario preguntarle a éste. Esto también implica el supuesto de que, de alguna manera, el sujeto es consciente, tiene el conocimiento necesario para acceder a la información que se le solicita. El tercer bloque de técnicas ha sido elaborado por aquellos que sospechan que la motivación (lo que al sujeto realmente le gustaría hacer) está más allá de lo que hace en realidad y más allá de lo que cree y piensa que hace. Por eso ese tipo de técnicas utilizan métodos indirectos de acceso a la información.
LA MOTIVACIÓN
¿MOTIVACIÓN Y SATISFACCIÓN SON COSAS DISTINTAS?
TEORÍAS DE LA MOTIVACIÓN
INDICADORES DIRECTOS DEL COMPORTAMIENTO MOTIVADO

¿SE PUEDE MEDIR LA MOTIVACIÓN?
Como se sabe motivación significa motivos en acción. Es necesario tener una causa fuerte, un objetivo determinado, para ponerse en marcha hacia el logro del mismo.
Los mecanismos o variables que giran en torno a la motivación son dos:
Intensidad de la meta (la claridad y fuerza de la visión en el sueño). Esto significa que debemos preguntarnos de forma seria y profunda ¿cuál es la meta que tenemos en un horizonte próximo? Y además si esa meta ese objetivo es fuerte, duradero, constante o por el contrario es banal, cambiante, sin sentido y sin rumbo. En este último caso la meta u objetivo no tendrá fuerza para movernos hacia su consecución.
Intensidad del empeño o esfuerzo para el logro ¿Qué estamos haciendo para conseguir esa meta o objetivo, ese sueño visionado? Nos estamos poniendo en marcha de una forma adecuada. Estamos iniciando un proceso cuyo desarrollo nos llevará my probablemente a conseguir la meta. O por el contrario no estamos dando sentido al proceso. No hacemos las cosas con coherencia o las hacemos de una forma insuficientemente fuerte y con desgana. En este segundo caso tampoco nos vale.
Utilizando estas dos variables podríamos llegar a medir "la superficie de la intensidad de la motivación". Se puede apreciar diferentes zonas de la motivación.
También mediante la combinación de en una matriz de estas dos variables podemos obtener cuatro fenotipos relacionados con la motivación. 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Bolles, Robert C. (1973). Teoría de la motivación investigación experimental y evaluación. México D.F: Trillas.

Fernández-Ballesteros, Rocío. (1998). Introducción a la evaluación psicológica. Madrid: Pirámide.
Fernández Ballesteros, Rocío (2007). Evaluación psicológica: conceptos, métodos y estudio de casos. Madrid: Pirámide. 
Huertas, Juan A. (2001). Motivación: querer aprender. (2a ed.). Buenos Aires: Aique.

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